Higiénico, fácil de limpiar y con una larga vida útil
El acero inoxidable es el material preferido de los chefs profesionales
No es casualidad que aproximadamente el 70% de los fregaderos de todo el mundo sea de acero inoxidable, son elegantes, atemporales y quedan bien en casi todas las cocinas. |
No todos los aceros inoxidables son iguales. El acero inoxidable de Franke es un AISI 304 que contiene una elevada proporción de níquel (10%) y cromo (18%) que le confieren mayor resistencia a la corrosión, a la temperatura e inercia frente a agentes externos.
El acero inoxidable de Franke presentan gran resistencia a la corrosión, gracias al conocido fenomeno de la PASIVACIÓN, que se genera cuando el cromo y el oxígeno se combinan para formar una capa protectora que se renueva continuamente. De este modo evitamos el óxido y le aportamos gran resistencia al material
Poseen una superficie totalmente libre de poros para facilitar su limpieza, aportando higiene en el área de preparación de alimentos.
Material 100% reutilizable gracias a la composición de un 70% de material reciclado.
Trabajar con el acero inoxidable más fino nos permite crear fregaderos más grandes con una sola chapa metálica y marcas de procesamiento mínimas. Esto confiere un mayor atractivo al fregadero.
Mientras otros fabricantes utilizan chapas de acero inoxidable pulidas previamente, en Franke aplicamos como a nuestros fregaderos un proceso adicional de pulido. Así, el fregadero conserva su atractivo durante más tiempo y desarrolla una superficie que se mantiene con el paso de los años.
Para su mantenimiento diario, basta con limpiarlo con un paño agua y jabón, aclarar bien la superficie y secarlo con delicadeza.